El objeto principal de la norma debería ser garantizar que la tenencia de animales en la ciudad no deteriore la vida de los ciudadanos. La decisión de una persona de tener un animal en cautividad no debe ser sufrida por los demás. El resto de los ciudadanos no tiene porqué aguantar ladridos, esquivar excrementos por la calle o charcos de pis en cada esquina.
El objeto principal de la norma debería ser garantizar que la tenencia de animales en la ciudad no deteriore la vida de los ciudadanos. La decisión de una persona de tener un animal en cautividad no debe ser sufrida por los demás. El resto de los ciudadanos no tiene porqué aguantar ladridos, esquivar excrementos por la calle o charcos de pis en cada esquina.