El Ayuntamiento mejora la red de riego de los jardines de Chimisay Bajo

Se actuará en una superficie de 20.630 metros cuadrados para ahorrar en consumo de agua, además de aplicarse nuevos criterios paisajísticos

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha iniciado un programa de mejoras en la red de riego existente en el grupo de bloques del barrio de Chimisay Bajo, lindante con la avenida Príncipes de España. Esta iniciativa forma parte de la tercera fase del programa de sostenibilidad y eficiencia de las zonas verdes de la capital y alcanzará a una superficie total ajardinada de 20.630 metros cuadrados. El presupuesto de esta actuación asciende a 176.940,35 euros.

El alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, visitó esta zona de la capital junto al cuarto teniente de alcalde y concejal del Distrito Ofra-Costa Sur, Dámaso Arteaga, con el fin de comentar con los residentes las mejoras que supondrá la implantación de este novedoso sistema.

Bermúdez incidió en que la instalación de esta red de riego automatizado “supondrá un importante ahorro en consumo de agua, al tiempo que garantizará el suministro necesario para que las especies vegetales con las que cuentan estos jardines sigan desarrollándose de una manera correcta”.

“Del mismo modo –prosiguió–, los técnicos municipales han realizado un estudio sobre los criterios paisajísticos que deben cumplir estas zonas verdes, seleccionando aquellas especies que, por su porte y dimensiones, no supongan un problema para la seguridad de los vecinos por su elevado desarrollo o levanten la calzada produciendo caídas”.

Arteaga, por su parte, expresó que todas estas zonas “comparten ciertas particularidades que hay que modificar seleccionando nuevas especies vegetales que eviten la presencia, como sucede en algunos casos, de árboles de gran porte pegados a las fachadas o en jardineras de dimensiones insuficientes”.

En este sentido, indicó que determinados ejemplares de Ficus elástica o el Schinus molle, conocido también como falso pimentero, se caracterizan por tener unos sistemas radiculares muy agresivos que afectan no solo a las aceras, sino también a ciertas instalaciones como el alcantarillado.

“Por todo ello –continuó– la idea es aplicar nuevos criterios estéticos y paisajísticos que permitan mejorar estos jardines desde la primera quincena de agosto y hasta casi la mitad del próximo mes de noviembre”.