La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha aprobado esta semana la contratación del servicio de dirección de la obra de rehabilitación del muro de cerramiento del edificio Villasegura, ubicado en la céntrica rambla 25 de julio de la capital tinerfeña, que se suma al proyecto de rehabilitación integral de este inmueble de indudable valor patrimonial que fue históricamente sede de la Escuela de Comercio.

Con esta licitación, por un importe global superior a 13.600 euros y un plazo de ejecución de obras de 3 meses desde su inicio, el Ayuntamiento da respuesta a un problema puntual de la edificación y complementa el proyecto de rehabilitación integral, que se desarrolla en el marco del convenio de colaboración suscrito a finales de 2017 con el Cabildo Insular, dentro del Marco Estratégico de Desarrollo Insular (MEDI).

La previsión que establece el MEDI recoge la rehabilitación de este inmueble por un presupuesto máximo de 2.049.220 euros que serán afrontados de forma equitativa por ambas administraciones, a razón de 1.024.610 euros respectivamente.

Donación  

Este edificio histórico debe su nombre a su promotor, Imeldo Serís, marqués de Villasegura, quien donó en su testamento 100.000 pesetas de la época para la construcción en la capital de un establecimiento de utilidad pública, destinado a beneficencia, a caridad pública o a enseñanza. 

Imeldo Serís, Marqués de Villasegura, nació en Santa Cruz el 29 de agosto de 1848. Ejerció 24 años en la Armada española antes de dedicarse a la política. Tras participar en la Guerra de los Diez Años y obtener numerosas distinciones, el 15 de noviembre de 1883 se rehabilitó a su favor el título de Marqués de Villasegura. 

En la legislatura 1893-1894 fue senador por la provincia de Canarias, y posteriormente representó a Canarias en el Congreso desde 1896 hasta 1904, año en el que falleció repentinamente a los 56 años de edad.

El edificio que financió fue diseñado inicialmente en 1908 por el arquitecto Manuel de Cámara y dos décadas después fue concluido por Antonio Pintor y destinado a albergar, atendiendo a la voluntad de su impulsor, la Escuela de Comercio desde 1939, compartiendo sede con el Archivo Histórico Provincial hasta 1964. En esa fecha, la Escuela se trasladó a la facultad de Ciencias Económicas y Empresariales en La Laguna.