El Distrito Centro-Ifara acogió la celebración de la recreación romera del Cristo de Paso Alto. Esta tradición, recuperada hace tres años, consiste en la celebración de un paseo rememorando la costumbre que los habitantes de El Toscal hacían para agradecer la protección que dio la imagen a la ciudad durante el ataque del contralmirante inglés Horacio Nelson.

De hecho, esta costumbre nació después de que, en julio de 1797, cayesen hasta 41 bombas sobre el castillo de Paso Alto y ninguna de ellas lograse dañar el cuadro de este Cristo que se encontraba en su interior.

En la misma participaron el alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez; la primera teniente de alcalde y concejal de Seguridad Ciudadana, Zaida González; el quinto teniente de alcalde y concejal del Distrito Centro-Ifara, José Carlos Acha; y la concejala de Patrimonio, Yolanda Moliné, además de otras autoridades militares y eclesiásticas.

Los integrantes de la Asociación de Recreadores del 25 de Julio se concentraron junto a la cruz de San Agustín, situada en la esquina de las calles San Francisco y La Marina, acompañados de distintos grupos folclóricos. En ese lugar se ofició un responso en memoria de los vecinos fallecidos en El Toscal y se colocó un ramo de flores ante la cruz de San Agustín.

El paseo romero discurrió por la glorieta Arquitecto Marrero Regalado hasta el Museo del cuartel de Almeyda, donde se celebró una misa canaria con presencia de agrupaciones folclóricas que interpretaron folías alusivas a la figura del Cristo de Paso Alto.