La alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife recibe la visita oficial del embajador ruso

La alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, Patricia Hernández, ha recibido la visita oficial del embajador de Rusia en España, Yuri Korchagin, quien se desplazó desde Madrid hasta la Isla con motivo del atraque en el puerto de la capital tinerfeña del buque escuela ruso Kruzenshtern.

El embajador acudió al Palacio Municipal acompañado de su Tercer Secretario y Jefe de Protocolo, Erik Nurgaleev, para felicitar por las fechas navideñas a la alcaldesa e invitarla a conocer la nave en una recepción a bordo antes de que zarpe este domingo rumbo a Brasil.

Korchagin señaló que, en el velero, uno de los más grandes del mundo, hay embarcados más de un centenar de alumnos que estos días pueden verse paseando por las calles de la ciudad y destacó que Canarias es uno de los destinos turísticos preferidos por sus compatriotas. La regidora municipal elogió asimismo el interés y la implicación de estos visitantes “que vienen a Santa Cruz porque les gusta salir del hotel y conocer el sitio en el que están”. 

Patricia Hernández mantuvo un animado encuentro con el diplomático en el Salón Rojo del Consistorio, cuyo nombre e historia llamaron la atención a Korchagin, quien detalló que, como en este caso, en la Plaza Roja de Moscú tampoco imperan los elementos de ese color.

El embajador acudió al Consistorio atravesando el parque García Sanabria, sobre el que se deshizo en elogios, como también dedicó palabras de admiración al Belén bíblico instalado en la entrada a las dependencias municipales, por cuyas figuras y composición preguntó.

Además, resaltó la localización estratégica y conectividad de las Islas y admitió que, aunque desearía disponer de más tiempo para disfrutar de sus atractivos, sus visitas a Santa Cruz de Tenerife han estado motivadas siempre por motivos profesionales.

Al término de la reunión ambos mandatarios se hicieron un intercambio de presentes. La primera edila le regaló una corbata y unos gemelos y el embajador ruso le hizo entrega a la alcaldesa de un paño de lana artesanal típico en su país y que, como apuntó “parece español”, así como unas láminas de paisajes típicos que, apreció Hernández, “recuerdan a Lanzarote”.

Según datos de la embajada rusa, en Canarias viven unas 2.000 personas de esa nacionalidad.