La compañía Pieles presentará su espectáculo “Canto al trabajo” en la plaza de la Candelaria mañana, sábado 19, a las 21:30 horas. El acto forma parte de la agenda de las Fiestas de Mayo de Santa Cruz y la entrada será gratuita. Basado en la música tradicional, mezclada con las artes modernas, la compañía ha creado este espectáculo que muestra la manifestación del trabajo tradicional del pueblo por medio de cánticos y el folclore.

Producido por Factoriadelarte, “Canto al trabajo” es una propuesta escénica que engloba distintos medios de expresión atrayentes para el público: música, imagen y palabra, unidas en una propuesta sonora de gran valor antropológico y didáctico. El espectáculo es una "apología al trabajo y a las tradiciones con un carácter vanguardista", según detallan sus promotores.

La concejala de Fiestas, Gladis de León, destacó la calidad de un espectáculo “que coloca a la programación musical de las Fiestas de Mayo entre las más importantes que se organizan en Canarias” y recordó la entrada gratuita “para una representación que viene avalada por la crítica como uno de los mejores espectáculos hechos en Canarias”.

“Canto al trabajo” se nutre de la fuerza y la autenticidad. Los cantos de trabajo son la manifestación de la voz del pueblo y de la necesidad de expresión propia. Para alcanzar esta propuesta cultural, Pieles recrea la sonoridad popular de la música a través de una novedosa experiencia en la que los instrumentos clásicos colaboran con los recursos folclóricos más primitivo: la piedra, el cristal, la madera y el metal.

El trabajo de la compañía se apoya en la condición natural de Canarias como punto de acercamiento de culturas diversas, lo que genera un canto plural, a un tiempo canario y universal.

El nombre Pieles que adopta la compañía se vincula a las pieles de los antepasados, "que rezuman esfuerzo, dedicación, amor", en referencia a aquellos hombres y mujeres que se han dejado la piel en las labores del campo y del hogar. Igualmente, es una referencia a las pieles animales que habitan en los tambores y que los dotan de vida propia, de fuerza, de emoción mientras dibujan ritmos ancestrales.