La visita de las agrupaciones del Carnaval de Murcia convierte al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife en una gran fiesta

Patricia Hernández recibió en el Salón de Plenos del Consistorio capitalino a su homólogo José Ballesta, quien acudió acompañado de más de 150 miembros de los grupos organizadores del Entierro de la Sardina en la localidad levantina, que participarán hoy en la Cabalgata chicharrera.

La alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, Patricia Hernández, recibió anoche en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de la capital al alcalde de Murcia, José Ballesta, y los 200 integrantes de la veintena de asociaciones que organizan el Entierro de la Sardina en Murcia, una fiesta, al igual que los chicharreros de Carnavales, declarada Bien de Interés Turístico Internacional.

El acto, que inundó la Cámara de color, luces y sonido de silbatos portados por los asistentes, que en todo momento expresó su alegría y entusiasmo, se sintió con la presencia también, por parte de la Corporación santacrucera, de los conciertos de Fiestas, Andrés Martín, Empleo, Ana Delia Darias, y Tecnología, Heriberta Granado y, por parte del Ayuntamiento de Murcia, del responsable de Cultura y Recuperación del Patrimonio, Jesús Pacheco.

La alcaldesa de Santa Cruz invitó a la comitiva “sentirse como en casa” y agradeció a las asociaciones sardineras de Murcia su participación en la Cabalgata Anunciadora del Carnaval chicharrero, donde reproducen la costumbre de su Entierro de la Sardina de repartir juguetes entre los niños y las niñas que acudan al desfile. Su paso difícilmente pasará inadvertido, no solo por este detalle, sino porque irán ataviados con elementos de luces parpadeantes.

La primera edila señaló que “por las venas de su pueblo y el nuestro corre la misma sangre carnavalera” y destacó “la esencia callejera” y el carácter irreverente ”de los Carnavales. En concreto, calificó el Entierro de la Sardina como “uno de los eventos más espontáneos y genuinos” de la fiesta y despertó el regocijo y asombro de los presentes cuando se presentan la idiosincrasia de este acto en Tenerife, donde las plañideras y otros miembros del sepelio “purgan, entre llantos y convulsiones, los excesos cometidos durante los festejos”.

El motivo principal del encuentro solicitado por el mandatario murciano era, en sus palabras, “estrechar aún más los lazos de unión” entre ambas ciudades e “iniciar el hermanamiento oficial” de sus respectivas fiestas. En su alocución comenzaba con un guiño al pueblo chicharrero: “Desde bien lejitos venimos, Santa Cruz, para contarte, 2.100 kilómetros recorridos para hermanar nuestras fiestas” y, al igual que el presidente de la Agrupación de Sardineros, José Antonio Sánchez, concluía agradeciendo “la acogida, hospitalidad, cariño y afecto” recibido, que “ya para siempre ocupará un lugar en nuestros corazones como una cicatriz de oro”. 

Al término del encuentro, se produjo un intercambio de regalos. La alcaldesa entregó unas métodos institucionales y un libro con la historia de la ciudad, para posteriormente ser correspondida con, entre otros obsequios, la mayor distinción con un organismo público, la carroza de la sardina, así como un colgante representando la hoja de los limoneros de Murcia.

Los asistentes fueron invitados a un cóctel celebrado en el mismo Ayuntamiento y en la despedida, Hernández fue convencido por Ballesta asistió a la celebración en abril del Entierro de la Sardina en Murcia, festejo que este 2020 cumple 170 años de historia.