Santa Cruz elabora un catálogo con el patrimonio de sus árboles más singulares

El propósito del Ayuntamiento capitalino es que estos ejemplares puedan integrarse en una ordenanza municipal que permita su protección y conservación

El Ayuntamiento de la capital tinerfeña, a través de la Fundación Santa Cruz Sostenible, trabaja en la elaboración del catálogo con el patrimonio de los árboles más singulares con los que cuenta el municipio. Esta iniciativa se desarrolla, desde el pasado mes de febrero, en colaboración con la Fundación General de la Universidad de La Laguna (ULL).

El concejal de Medio Ambiente, Carlos Correa, explica que los encargados de realizar el documento “eligen los ejemplares que destacan por sus extraordinarias características botánicas, por su longevidad, su morfología, su razón taxonómica, su tamaño o su peculiar distribución, entre otros factores. También se tendrán en cuenta aquellos que puedan tener un significado cultural o histórico para la población”.

Correa agrega que, en este aspecto, “ha sido fundamental la colaboración del servicio municipal de Parque y Jardines, ya que han suministrado una valiosa información al tener alrededor de 50.000 árboles inventariados en todo Santa Cruz”.

Los directores del proyecto, Victoria Eugenia Martín y Wolfredo Wildpret, indican que el objetivo “es disponer de un listado de árboles singulares en nuestra capital con el fin de reconocerlos como patrimonio botánico municipal. La idea es integrar esos ejemplares en una ordenanza que permita protegerlos y conservarlos y, al mismo tiempo, disponer de una herramienta que ayude a su divulgación con el fin de que tanto los vecinos como los visitantes de Santa Cruz sean más sensibles con ellos”.

El proyecto arrancó con la celebración de distintas reuniones en las que participaron técnicos municipales. En esas sesiones, los responsables de esta iniciativa recabaron toda la información y datos disponibles sobre las zonas verdes de la ciudad.

Posteriormente, los ejemplares seleccionados comenzaron a ser visitados con el fin de que pasen a formar parte de una base de datos digitalizada, en la que se incluyen las fichas de los árboles singulares junto a su georreferencia.

En los últimos meses, estas labores de muestreo se han desarrollado tanto en las zonas verdes del municipio como en la zona sur del Macizo de Anaga, dentro del territorio considerado como Reserva Mundial de la Biosfera.