Santa Cruz refuerza y amplía la atención telefónica de los servicios sociales

La concejala de Acción Social, Rosario González, adelanta que el IMAS, tras la emergencia social decretada en julio, aumenta 60 horas semanales con un contrato por la vía de urgencia.

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha reforzado el sistema de información y atención telefónica del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), a través de un contrato de emergencia con la finalidad de ofrecer una mayor atención a todas las personas del municipio que necesitan ayuda de los recursos sociales. Este servicio, en lugar de ser de 08:00 a 14:00 como hasta ahora, pasaría a ofrecerse en horario de 08:00 a 16:00 horas.

La concejala del área, Rosario González, sostiene que “el Servicio de Información y Atención Telefónica (SIAT) del IMAS tiene como fin proporcionar a la ciudadanía un canal de información y de concertación de cita previa para los Servicios Sociales Municipales a través del teléfono gratuito 900 111 333, por lo que es imprescindible que este recurso disponga de una ampliación de horario para que esta ‘puerta’, a la que tocan muchas familias vulnerables, aumente sus horas de atención”.

“Éste nuevo contrato -el cuarto que se firma en apenas dos meses- permitirá ampliar el servicio con la contratación de seis nuevos empleados”, añade González. E incide en que “entre el nuevo personal, figuran cuatro operadores, que desempeñarán sus funciones durante las 60 horas semanales previstas en este nuevo contrato, y dos trabajadores/as sociales, con los que se ampliará esta función 30 horas semanales más”, adelanta la concejala de Acción Social.

El SIAT, que es la “puerta” de acceso principal de la ciudadanía a los Servicios Sociales y su catálogo de Servicios, Prestaciones y Ayudas Económicas, es un servicio esencial e imprescindible, más aún en esta época de crisis social y sanitaria por la pandemia de la COVID-19.

Es preciso recordar que el Estado de Alarma decretado por el Gobierno de España se extendió hasta el día 21 de junio, aunque no por ello en ese momento las personas del municipio en exclusión social o en riesgo de estarlo dejaron de necesitar una respuesta urgente por parte de la administración. Precisamente, por estas circunstancias y las que se avecinan, el alcalde, José Manuel Bermúdez, y la máxima responsable de los Servicios Sociales, Rosario González, el pasado 27 de julio utilizaron la herramienta de la emergencia social para amortiguar la situación de las familias más vulnerables.

Es conveniente destacar que este mecanismo permite agilizar la toma de decisiones y disponer de recursos casi de manera inmediata para atender a la población más vulnerable y hacer llegar las ayudas y subvenciones a las entidades y asociaciones.

Rosario González afirma que “cuando aterricé en el área como responsable, nos encontramos con más de un millar de llamadas que no tenían respuesta en el teléfono de atención telefónica del IMAS y esta nueva corporación municipal no podía seguir permitiendo dicha situación. Desde el minuto uno hemos estado ocupados y preocupados por este asunto, pero la situación que nos encontramos requería primero la declaración de la emergencia social, para  poder tener las herramientas que nos permitieran dar respuesta a nuestros vecinos/as, que se pasaban días detrás de un teléfono sin respuesta”.

En cuanto al refuerzo del servicio telefónico, un informe de CONTACTEL, quien gestiona este recurso, explicó que “entre los meses de marzo y agosto, la media de llamadas mensuales se situó en 10.270. Este dato significó un incremento del 31% durante los meses de declaración de la pandemia. Las llamadas atendidas fueron 9.428 (incremento del 26%) y las llamadas no atendidas aumentaron hasta las 842 (incremento del 123%). Asimismo ha aumentado en un 70% la media de llamadas entrantes que no han podido ni siquiera entrar en turno, ya que cuelgan cuando se encuentran retenidas”.

Según la edil, “es fundamental el aumento, no solo de los teleoperadores, sino también de trabajadores sociales, ya que en las mismas llamadas telefónica podremos dar respuesta a las urgencias sociales que se presenten. En principio, esperamos dar respuesta a toda la demanda con este nuevo contrato de emergencia pero, en caso de encontrarnos una situación social más agudizada, por ejemplo ante el caso de una posible no renovación de los ERTEs, si fuera necesario acudiríamos a una nueva ampliación”, apostilló González.

“Nuestro objetivo –asevera- es que nadie se quede sin respuesta, por lo que se utilizarán los medios necesarios para ello. El alcalde ya ha manifestado que Acción Social será la única área municipal que tendrá un aumento presupuestario debido a la grave situación económica derivada de esta pandemia”, finalizó la presidenta del IMAS.

Otros contratos de emergencia

El primer contrato de emergencia que firmó el IMAS tras la declaración de emergencia social en el municipio de Santa Cruz de Tenerife fue el de adecuación del Centro Municipal de Acogida (CMA) a las medidas de seguridad por la Covid-19, el día 31 de julio. Las intervenciones realizadas por el Organismo Autónomo permiten seguir sirviendo de soporte para los más de 250 usuarios diarios del recurso, ya que afectan a los recorridos de circulación, limitaciones de aforo de los locales y distancias mínimas interpersonales.

Una semana más tarde, el 7 de agosto, el IMAS resolvió el contrato por el cual las escuelas infantiles municipales Tara y Faina -ubicadas en Añaza y Ofra respectivamente- se someterían a unas obras de remodelación atendiendo al Protocolo de Prevención y Organización para el desarrollo de la actividad educativa presencial en los Centros Educativos no universitarios de Canarias para el curso académico 2020-2021, publicado por la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias.

El día 13 de agosto, la edil y presidenta del IMAS formalizó de emergencia una ampliación del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) para atender de inmediato a 40 usuarios más -que ya se encontraban en lista de espera para obtener el servicio- y, además, para incrementar cada mes la atención a 30 nuevos beneficiarios. En la actualidad hay 233 personas del municipio que reciben esta ayuda.