El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, acompañado por la concejala de Acción Social y el concejal del distrito Suroeste, Rosario González y Javier Rivero, respectivamente, visitaron en la tarde de ayer las instalaciones que ACTIVOZ tiene en la antigua ludoteca de Añaza, instalación cedida por la corporación y donde esta asociación tiene a casi 120 personas usuarias con diversidad funcional y “en la que tratan de poner en valor la inclusión, ya que trabajan con personas con grandes dificultades con otras con diferentes capacidades”, destacó Bermúdez.

En esta primera visita, se realizó un recorrido donde los profesionales que llevan adelante el proyecto ACTIVOZ destacaron que “se trata de una iniciativa que combina la logopedia y la pedagogía, y en paralelo el proyecto deportivo, para que las chicas y los chicos dispongan de actividad física en las canchas del colegio Secundino Delgado, que luego se complementa con las demás sesiones en estas instalaciones”, y añaden que “así aprovechamos, además, y dispensamos el apoyo a las familias, ya que se quedan con nosotros desde las 16:30 horas combinando el ocio con el deporte”.

El equipo está formado por profesionales de diferentes ámbitos que trabajar por y para la diversidad funcional. Tras años de experiencia en el trabajo de poblacional referente, sobre todo a nivel de intervención, detectan que las chicas y los chicos generalmente tienen pocos espacios donde poder desarrollarse física y socialmente, en un ambiente distendido y de ocio. “Además trabajan sobre el sobreesfuerzo que deben realizar, tanto ellos como las familias, para mantener las exigencias que cada proceso de intervención necesita”, añade la concejala de Acción Social, Rosario González.

Por su parte, Javier Rivero, concejal responsable del distrito Suroeste, destacó que se aprobó, “de forma provisional, el uso de este local, para que puedan seguir desarrollando su labor, que entendemos es fundamental e insustituible, y que afecta a la conciliación laboral y familiar, además del propio desarrollo y autonomía de los chicos y chicas que reciben los servicios, tanto en estas instalaciones como en el colegio cercano para la práctica deportiva”.

Por otra parte, en esta misma visita a Añaza se aprovechó para impulsar el contacto con el comedor social de la asociación Mensajeros de la Paz, que tiene en la avenida principal del barrio un local “donde atiende a más de 60 menores del municipio cuyas familias están atravesando dificultades económicas y sociales”, destacó el alcalde, que insistió en que “esta asociación trabaja en Añaza desde abril de 2014, cuando fue inaugurado este local, al que el Ayuntamiento deriva a las familias del municipio que sus menores tenga esta necesidad”.

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), que preside la concejala nacionalista Rosario González, ha firmado un acuerdo de colaboración con esta asociación sin ánimo de lucro con la finalidad de “crear un espacio en el barrio de Añaza que sirve de apoyo a 60 familias vulnerables de la capital con menores a su cargo”, señala la edil, que apostilla que, además, “incluye productos frescos, lo que es un aliciente para muchas de nuestras familias más vulnerables”.