Conchi

44.800 perros viviendo en pisos es un dato alarmante. La posesión de una mascota está más cerca del maltrato que del amor a los animales y no se debería facilitar ni promover. Urge revisar el mascotismo, privar a un animal de su libertad por mero capricho no es compatible con el animalismo. Se necesitan auténticos malabarismos éticos para justificar la posesión de una mascota. Por una vez vayamos por delante y seamos una ciudad animalfriendly y petunfriendly.

4 votos  | 
4
0
Sin respuestas