La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Gladis de León, inauguró el viernes en el Museo de Bellas Artes “Un huésped adecuado”, instalación con la que se cierra la Residencia Artística Tarquis-Robayna correspondiente al año 2019. Acompañando a la tercera teniente de alcalde estuvo el artista Néstor Delgado, autor de la muestra.

La finalidad de la citada Residencia Artística, que se convoca anualmente por el área municipal de Cultura, es que un creador lleve a cabo un proyecto de investigación relacionado con una pieza, artista, escuela, técnica, etc. que tenga alguna vinculación representativa o simbólica con el Museo. Posteriormente se organiza una muestra con el trabajo desarrollado.

Gladis de León manifestó que la propuesta artística de Néstor Delgado entabla un diálogo entre lo que el museo muestra y esconde. Añadió que durante los meses de duración de la Residencia Artística el trabajo de Delgado se centró en numerosos objetos, legajos, documentos y materiales. El artista se planteó como se fueron generando las colecciones que se exponían al público, cuáles se fortalecían y hacían visibles, y cuáles fueron quedando ocultas.

Néstor Delgado indicó que esta experiencia ha sido muy positiva y le ha permitido trabajar con archivos muy diversos y material variado que se encuentran fuera de la mirada del público, dándole la oportunidad de ahondar en la parte no visible del Museo. Este concepto, el de los objetos fuera de la mirada de los visitantes, sobre lo que la institución museística muestra y esconde, es lo que ha inspirado su instalación “Un huésped adecuado”. Para ello se muestran de forma velada piezas e imágenes que forman parte de los fondos del Museo de Bellas Artes, pero que han permanecido ocultas.

La investigación de Néstor Delgado durante la Residencia Artística Tarquis Robayna incluyó los legajos guardados en el armario del almacén visitable del Museo Municipal de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife. Custodiados bajo llave, en él se apilan documentos, apuntes de historia natural, recortes de prensa y enciclopedias del siglo XIX. Esta variedad de materiales es un vestigio de lo que fue el germen del museo. Al tiempo, el artista también partió de ilustraciones de los archivos del museo para trabajarlas a través de técnicas de estampación en linóleo sobre tela.

Cuando Teodomiro Robayna y Pedro Tarquis Soria buscaban una sede para fundar la institución, lotes de cuadros y colecciones científicas viajaron juntas de un lugar a otro, ocupando provisionalmente un teatro y un convento. Esta mudanza en busca de albergue acabó cuando se terminó el actual edificio del Museo, construido por Eladio Laredo.

Al recapitular sobre la etapa de constitución del museo Néstor Delgado se plantea la pregunta sobre si al museo lo constituye el inmueble o unas colecciones migrantes. ¿Quién es el parásito y quién el hospedador? En su opinión, “tal vez, un museo sea un lugar donde visitantes, colecciones y arquitectura se encuentran en estado simbiótico. Esta imbricación implica que algunas cosas se hagan visibles y fortalezcan y que otras se debiliten y vayan quedando ocultas. Así ocurrió en este Museo: la purificación genética de la disciplina desplazó las colecciones científicas a favor de las Bellas Artes”.

Cómo ya se indicó, Delgado ha querido fijar la atención en aquello que ha sido custodiado lejos de la mirada pública: un armario donde se almacenan, entre otros materiales, ilustraciones científicas y reproducciones gráficas. Opina que “como los habitantes de una masa de tierra que se ha separado del continente, allí continúan en su deriva: no están ordenadas por las mismas categorías y su historia no es lineal”. La muestra se podrá visitar hasta el 28 de febrero.

Néstor Delgado Morales (Tenerife, 1986) es investigador, artista y comisario. Ha desarrollado entre otros los proyectos Buhardilla (TEA Tenerife Espacio de las Artes, 2010), y El hombre en el mundo (Sala SAC, 2009). Junto con María Laura Benavente fundó La Piscina Editorial (www.lapiscineditorial.com) y ha organizado las cuatro ediciones de “Pliegue. Encuentro de autoedición en Tenerife”. Asimismo, ha sido miembro del espacio de producción y colectivo artístico El Apartamento y de La Oficina para la acción urbana.

Asimismo ha sido director del programa de pensamiento crítico cultural de TEA “Tenerife ¡Autonomía! ¡Automatización!”. Delgado ha comisariado numerosas exposiciones. En el año 2016 fue ganador el proyecto Área 60 de TEA Tenerife Espacio de las Artes y en 2019 coordinó el programa de residencias artísticas en TEA.