El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través de la concejalía de Acción Social, Educación y Juventud, garantiza la continuidad y la calidad en el servicio que ofrece a las familias con niñas y niños de 0 a 3 años, en sus dos escuelas infantiles, Tara (Añaza) y Faina (Ofra-Costa Sur) en sus 140 plazas, y en las que se invierte un total de 2.699.751,91 euros, dividido en tres anualidades, desde 2023 a 2025, con la posibilidad de prorrogarse otros dos años más, en favor de la empresa Koala, Soluciones Educativas, S.A.
El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, por su parte, pone en valor que el servicio que las Escuelas Infantiles municipales ofrecen a las familias con niñas y niños de 0 a 3 años, “precisamente con el objetivo de una educación temprana, pero también colaborando, de esta manera, con la conciliación de la vida familiar y laboral” y añade que “este contrato plurianual garantiza el funcionamiento y los estándares más altos de calidad educativa en estas edades, al tiempo que se dispondrán de 140 plazas en las dos instalaciones ubicadas en los distritos Suroeste y Ofra-Costa Sur”.
Por su parte, la concejala del área, Charín González, pone de manifiesto que “este servicio, al disponer de una financiación contractual plurianual, posibilita la estabilidad de las Escuelas Infantiles, al tiempo que permite programar unas actividades de continuidad que favorecen la integración y la adaptación de las niñas y niños al contexto escolar” y agrega que “además de significar para las familias una oportunidad y una ayuda para la conciliación laboral y familiar”. Además, destaca “la incorporación de una pedagoga terapéutica y un educador social que prestan sus servicios en los citados centros”.
Desde el punto de vista de los servicios que se prestan, González recuerda que “se ofertan, además del educativo, el comedor, servicio de guarda y atención para la conciliación de la vida laboral y familiar, la formación para familias y actividades lúdico-recreativas, culturales y sociales” y añade que “la adjudicataria fomenta el pluralismo y valores democráticos, la educación científica y crítica, en valores, la integración de la diversidad, la educación ambiental y emocional, además de la adaptación a la evolución del niño, el interculturalismo, en un aula abierta al entorno, con la comunidad educativa como protagonista de esta tarea”.
Por su parte, Koala basa su modelo de enseñanza en cinco pilares fundamentales que tienen que ver con aquellas facetas que persiguen el desarrollo integral del alumno y la alumna, con una excelencia del proyecto educativo como garantía, ya que Koala ha Certificado por SGS según las normas de calidad, Medio Ambiente y prevención de riesgos laborales los Centros Educativos que gestiona, desarrollando un modelo de atención con enfoque integral para estimular el potencial innato de aprendizaje de cada niño favoreciendo su desarrollo físico, emocional, social y cognitivo.
Además, persigue el desarrollo de iniciativas educativas con raíces sólidas en I+D+i, tanto a nivel de metodología educativa innovadora (Loczi, Montessori, etc.) como mediante el desarrollo e implementación de herramientas TICs y Escuela 2.0, con el objetivo de ofrecer al alumnado una educación al más alto nivel, popr lo que se encuentra certificada en la norma UNE 166002- Sistema de Gestión de I+D+i.
También dispone entre sus pilares básicos de un enfoque artístico-deportivo y en pro de la naturaleza, con enseñanza en música que así mismo transmita valores de solidaridad, tolerancia y actuaciones para cuidar el Medio Ambiente que motive en el respeto hacia los demás y hacia la naturaleza, con especial adaptación y personalización al entorno y a la escuela, por lo que se consideran las características diferenciales del barrio, su cultura y su gente, así como de la propia escuela.
Para finalizar, la concejala pone en valor que “una de las premisas de Koala busca en el enfoque de trabajar en la mejora continua de la escuela infantil, una idea, basada en la formulación de cien escuelas, cien ideas” y da relevancia a que “el proyecto educativo propuesto por la empresa adjudicataria del servicio dispone para ello de procesos de mejora continua, introducción de innovaciones pedagógicas y tecnológicas, entre otras”.
Plan de Formación de Familias
Como equipo, Koala propone un proceso de relación, comunicación y colaboración con las familias, con una educación basada en los contextos, la coherencia y la continuidad del proceso educativo, ya que consideran esencial durante la etapa de 0-3 años en las escuelas. Las relaciones de las familias con las escuelas suponen un cambio de actitud y de adquisición de nuevos conocimientos y destrezas para conseguir la calidad educativa que se busca en los centros educativos.
Por ello se plantea la Escuela de Padres y Madres, donde se lleva a cabo, con carácter trimestral (que podrá variar según las necesidades detectadas o según la disponibilidad de padres, de ponientes, etcétera), una escuela de padres y madres la cual consistirá, principalmente, en cursos, charlas, talleres, ponencias y reuniones en las que participen los padres y madres y miembros del equipo educativo del centro, así como personal especialista de diferentes áreas relacionadas con los pequeños.
En concreto, se llevarán a cabo cursos y talleres con profesionales como médicos, enfermeros, policías, profesores, nutricionistas, etcétera, que formarán e informarán a los padres y madres asistentes en toda la materia relacionada con la educación y cuidados de sus hijos. El objetivo general de las escuelas de padres y madres es facilitar información y apoyo psicosocial y pedagógico para que las familias mejoren sus recursos relacionados con la educación de sus hijos.
Actividades formativas complementarias
Las elegidas finalmente se hacen en consonancia con las familias y son llevadas a cabo inicialmente entre los meses de octubre a junio, previa planificación y difusión. En concreto, se ofertan un mínimo de 8 actividades formativas complementarias por curso, aunque se podrán modificar y/o sustituir alguna de las detalladas por otras similares en cursos posteriores o según demanda de las familias. Todas las actividades durarán entre 4 a 10 horas (divididas normalmente en varios días) y serán ejecutadas preferentemente fuera del horario educativo.