Santa Cruz se ofrece a colaborar con la asociación de familiares de daño cerebral

El Ayuntamiento informa a la asociación tinerfeña del catálogo de ayudas sociales municipales y se compromete a sumar en la tarea de concienciación

El quinto teniente de alcalde y concejal de Atención Social, Óscar García, recibió hoy a una delegación de la Asociación tinerfeña de Familiares de Daño Cerebral Adquirido (Adacea) para informar del amplio catálogo de ayudas municipales a las que se pueden acoger y a su vez para trasladar el compromiso de Santa Cruz con la sensibilización social hacia esta patología médica consecuencia, entre otros, de accidentes cerebrovasculares y traumatismos craneoencefálicos.

La asociación tinerfeña, presidida por Arturo Rincón e integrante de la Federación Española de Daño Cerebral (Fedace), comunicó al concejal la oportunidad de sumar voluntades, públicas y privadas, para concienciar a la sociedad tinerfeña de esta realidad y la necesidad de ir articulando una red de atención tanto a los pacientes como a sus familiares.

Óscar García, por su parte, animó a la asociación a acudir al procedimiento administrativo ordinario de inscripción y reconocimiento de la asociación como entidad ciudadana de la capital, para poder concurrir al igual que el conjunto del movimiento asociativo social de la ciudad a las distintas convocatorias de subvenciones que gestiona el área de Atención Social.

El Daño Cerebral Adquirido (DCA) es una lesión repentina en el cerebro. Se caracteriza por su aparición brusca y por el conjunto variado de secuelas que presenta según el área del cerebro lesionada y la gravedad del daño. Estas secuelas provocan anomalías en la percepción, alteraciones físicas, cognitivas y emocionales.

La principal causa de daño cerebral es el ictus, seguida de los traumatismos craneoencefálicos y enfermedades como las anoxias, los tumores cerebrales o las infecciones.

Los ictus se producen por la interrupción repentina del flujo sanguíneo en una zona del cerebro. El 44% de las personas que sobreviven a un ictus desarrollan discapacidad grave por el daño resultante.

Cuando la lesión cerebral es un golpe o traumatismo, con frecuencia el origen del daño es un accidente de tráfico, aunque también pueden tener su explicación en un accidente laboral, una caída o una agresión física.

Incidencia

Según acredita la Fedace con datos referidos al año 2015, en España viven 420.000 personas con Daño Cerebral Adquirido. El 78% de los casos tuvieron su origen en un ictus y el 22% restante en traumatismos craneoencefálicos y otras causas.

Cada año se dan 104.701 nuevos casos de Daño Cerebral Adquirido: 99.284 por accidentes cerebrovasculares, 4.937 por traumatismos y 481 por anoxias.

El 65,03 % de las personas con daño cerebral adquirido son mayores de 65 años, dato que se relaciona con la alta incidencia del ictus en un colectivo en el que la mayor parte (52%) son mujeres.

A pesar de este porcentaje, solo el 42% del total de personas con este daño solicitaron valoración de su dependencia eran mujeres. Este aspecto sugiere un factor de vulnerabilidad de las mujeres con daño cerebral, que solicitan en menor medida que los varones el reconocimiento administrativo de la discapacidad; situación que los investigadores relacionan con factores de edad y culturales.