El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del área de Infraestructuras, ha comenzado este miércoles las obras que tratarán de resolver, en una primera fase y con carácter de urgencia, las patologías de los problemas principales que tienen el puente de San Andrés que permanece cerrado al tráfico pesado por el desprendimiento de cascotes el pasado mes de mayo.

Así lo anunció el concejal de Infraestructuras, Dámaso Arteaga, quien estuvo acompañado de la concejala del distrito, Inmaculada Fuentes, en la reunión que mantuvo este martes con representantes de cada asociación de vecinos de Anaga a las que transmitió que “nuestro compromiso es intentar buscar una solución que permita que en ningún momento quede aislado o quede cortado el tráfico el macizo de Anaga, y tener una alternativa mientras se ejecutan los trabajos en el puente”.

“De aquí a dos meses quedará el puente reforzado, remodelado y con una capacidad portante que los técnicos deberán valorar, ya que estamos hablando de entre 10 y 12 toneladas en principio. Eso nos va a permitir que la mayor parte de los vehículos puedan pasar y de esa manera garantizar la comunicación entre San Andrés y los pueblos y caseríos del macizo de Anaga”, añadió Arteaga.

El edil aprovechó la reunión para anunciar los contactos con el Ejército, quien se ha puesto a disposición del municipio para la colaborar en el  montaje de una infraestructura paralela al puente mientras este permanezca cerrado debido a los trabajos de rehabilitación.

Por último, se ha aprobado el inicio del proyecto de remodelación definitiva del puente, en el que se barajan varias alternativas que pasan por la remodelación del actual puente o la sustitución por otro nuevo, soluciones que permitirán capacidad portante mayor. Además, se trabaja en el desarrollo de la vía alternativa de comunicación con las zonas de Anaga, a través del desarrollo del Plan General.